Por tal motivo se organizaron una serie de actividades para homenajear a los chicos: juegos, bailes, música infantil y fiesta de elegantes disfraces como sucedió en el “Duendelín” del barrio.
Se realizaron además para la ocasión, puestas en torno a la profundización de los vínculos sociales y de los afectos familiares, todo en un ambiente de juegos, disfraces y entusiasmo que compartieron no sólo los niños, sino también las docentes y los padres.