Hubo comidas, tragos, bandas, danza, tatuajes, acrobacias y mucho más. Fue un sábado distinto en el que todos los espacios de la Nave Cultural alojaron una intensa dosis de cultura urbana con la quinta edición de la Vendimia Urbana.

Con entrada gratuita, asistieron familias, jóvenes, niños, adultos y los más heterogéneos grupos de amigos. En los foodtrucks ubicados en la explanada se podía disfrutar de comida sana y consciente, y también fast food como pizzas, panchos, choripanes y hamburguesas. Hubo tragos, vino, jugos, licuados y cerveza que pudieron satisfacer todos los gustos durante la tarde y la noche.

La sala mayor de la Nave estuvo copada por las distintas casas de tatoos, donde muchos decidieron ilustrar su piel de la mano de los mejores profesionales de la provincia en el arte de tatuar.

Afuera, en los jardines, un imponente escenario hizo sonar con toda la potencia a las bandas invitadas a este encuentro: Spaghetti Western, Usted Señalemelo, Charlie 3, La Skandalosa Tripulación y el cierre de lujo con el punk de El Otro Yo.

Entre el armado y desarmado de las bandas, también hubo espacio para coreografías de breakdance y otras danzas urbanas, como así también las acrobacias típicas de quienes practican el asombroso deporte urbano conocido como parkour.

Otra edición exitosa de la Vendimia Urbana copó la tarde y la noche del sábado en la Nave Cultural, con miles de personas recorriendo las atracciones y demostrando que esta actividad ya está instalada en el calendario vendimial y no para de crecer en propuestas y convocatoria.