Construirán 1.000 rampas para discapacitados en el microcentro

Jul 23, 2009 Categoría: Ciudad

La comuna capitalina lanzó una licitación para construir y reparar mil rampas para discapacitados en diversas esquinas del microcentro. El área donde se trabajará es la delimitada por las calles Perú, Necochea, San Martín y Colón, en donde se harán ocho declives en cada intersección, con material antideslizante y pintura amarilla, así como con la inclinación de 7 a 8° que establece la normativa. La obra tiene un presupuesto de 473 mil pesos y un plazo de ejecución de 150 días.

En 2006, la gestión anterior lanzó un programa de pequeñas obras para la ciudad que incluía la reparación de mil esquinas. En aquel momento se eligieron intersecciones ubicadas en todo el departamento, que tuvieran una gran afluencia de personas, y se repararon las acequias, cordones, puentes y rampas.

Ahora se eligió el mismo número, pero en esta ocasión se contabilizan las rampas y no las esquinas. Esto, porque en cada intersección se harán ocho declives. La secretaria de Infraestructura, Servicios y Ambiente de Capital, Laura Profili, explicó que probablemente se reconstruyan todas las existentes porque la mayoría está deteriorada, y por otra parte se pretende unificar su apariencia. De todos modos, no descartó que se excluya algunas que se encuentren en buen estado.

Pese a que se trata de la zona bancaria y cada mañana confluye una gran cantidad de personas, ciertas esquinas del entorno de la plaza San Martín carecen de rampas. En el sector sur del cruce de España y Gutiérrez, donde se encuentran un banco y la Secretaría de Cultura de la provincia, no se observa esta infraestructura para personas con discapacidad motriz. Tampoco hay en todas las esquinas de la intersección de España y Necochea.

Por otra parte, en diversos sectores donde sí existen rampas, como en la esquina de 9 de Julio y Espejo, el cemento se ha desgranado y se han generado pozos en la pendiente, así como zanjas de hasta 10 centímetros de ancho en la unión de la estructura inclinada con la calzada.

Stella Maris Rodríguez, presidenta de la Asociación Solidaria para la Inserción Laboral del Discapacitado (Aspild), consideró muy bueno que se empiecen a eliminar las barreras para quienes tienen alguna discapacidad. Y si bien señaló que el microcentro es el sector donde más rampas hay, también planteó que muchas están rotas, especialmente en el empalme con la calle, por lo que esperó que la nueva obra contemple la forma de evitar que esto se repita en poco tiempo.

La mujer, que se moviliza con ayuda de un bastón, subrayó que también sería importante que se exija a los edificios de acceso público que cuenten con rampas en el ingreso y que se verifique que resultan útiles.

«Algunos colocan una para cumplir con el reglamento pero no se pueden usar con una silla de ruedas porque tienen una inclinación muy pronunciada», indicó.

María Eugenia García, de ADIM (Asociación de Discapacitados Motores), comentó que ella y su esposo crearon la entidad porque ambos se mueven en sillas de ruedas. Y si bien consideró que esta propuesta de la comuna capitalina es buena señaló que muchos sectores de la ciudad, como las calles al este de la avenida San Martín, no tienen rampas, por lo que deben utilizar la calzada -con el riesgo que esto implica- o esperar a que alguna persona la ayude a bajar y sobre todo subir los cordones.

Al respecto, Laura Profili indicó que se trata de una primera etapa, en la que tomaron el microcentro, pero planean avanzar en otras áreas más adelante.

«Yo tuve polio a los dos años, pero si una persona vivió toda su vida normalmente y sufre una discapacidad por un accidente, como es común ahora, cuando sale a la calle y encuentra todas las dificultades no vuelve a salir», planteó García. Y explicó que los colectivos no usan las rampas y los taxis no la llevan porque sostienen que no tienen lugar para la silla.

¡Unite a nuestras redes!