Esta mañana, en la ciudad de Ushuaia, se llevó a cabo el lanzamiento de la implementación del Programa GEF 7 – «Ciudades Sostenibles», mediante el cual la Ciudad de Mendoza fue seleccionada para la ejecución de este importante proyecto ambiental. El intendente capitalino, Ulpiano Suarez, participó del acto junto a otros representantes municipales del país, funcionarios nacionales y de organismos internacionales.
Este merecido reconocimiento al municipio se funda en las diferentes políticas desarrolladas por la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza en materia ambiental, tomando como referencia los resultados de sus acciones implementadas para configurar una ciudad sostenible. Por ello, la comuna ha sido seleccionada a nivel nacional para la ejecución del Proyecto “Ciudades Sostenibles”.
Se trata de un proyecto de alto impacto financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (Global Environment Facility, GEF), a través del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación. Al respecto, la Ciudad de Mendoza ha presentado y logrado un financiamiento que supera los USD 3.000.000, un monto histórico para el desarrollo de la agenda climática de los gobiernos locales.
A partir de esta destacada obtención, el intendente Ulpiano Suarez manifestó “Estamos muy contentos y orgullosos de haber sido seleccionados para implementar este proyecto internacional, que pretende consolidar un modelo de política y gestión climática susceptible de replicarse en otros municipios de la provincia y país. Desde un primer momento planteamos la transversalidad de la agenda ambiental en todas nuestras políticas públicas, es por eso que este reconocimiento internacional no sólo implica un fuerte respaldo para el cumplimiento de los objetivos planteados sino que también refuerza la necesidad de incorporar por parte de todos los gobiernos el gran desafío de luchar frente al cambio climático”.
El proyecto
La propuesta busca promover inversiones integradas bajas en carbono y conservación en ciudades argentinas, incentivando un desarrollo urbano resiliente al cambio climático, así como integrar la biodiversidad en todos los sectores y reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero mediante el planeamiento urbano integrado. También plantea la integración de valores ecosistémicos y consideraciones de biodiversidad en sectores productivos a través de la planificación integrada e inversiones en el terreno, mayormente asociadas al turismo, así como la promoción de acciones para la protección de especies y hábitats revirtiendo las dinámicas de degradación del suelo.
Con un enfoque de soluciones basadas en la naturaleza, entre las acciones planificadas por el municipio se encuentra el desarrollo, en un período de 4 años, de áreas de manejo sostenible en el piedemonte, eficiencia energética, movilidad sostenible, economía circular y mecanismos financieros, urbanismo táctico, monitoreo y sensorización ambiental, smart city y transferencia de resultados.
La ciudad ha elegido un modelo de diseño de proyecto participativo, por lo cual la implementación del mismo implica la incorporación del sector privado, organizaciones de la sociedad civil, así como el sector científico y académico. Lo mencionado refuerza espacios ya institucionalizados como es el Comité Municipal de Cambio Climático (creado a partir de la Declaración de Emergencia Climática decretada en enero del 2020).